

El toque es un film que quiebra el ambiente rìtmico que Bergman habìa alcanzado , especialmente en los dos films anteriores a los que ya aludimos para optar por un ritmo màs americano, es decir, un ritmo que atiende a las transiciones y forma de interesar al espectador en la historia . Para justificar tal cambio Bergman varìa la estratificaciòn socio-cultural de los personajes , siendo esta vez Max Von Sydow un profesional (mèdico) en actividad y Bibi Anderson una esposa burguesa que tiene a su cargo la direcciòn domèstica del hogar (se trata de una pareja con hijos menores, a diferencia de las de "Verguenza" y "La pasiòn de Ana"); esto se refuerza por el hecho de que vivan integrados a la ciudad y no aislados en una isla o casa de campo. Pero esta coqueterìa de Bergman con una forma de cine de consumo , concientemente asumida , y no sin ironia, ne los planos que presentan a la protagonista en actividades de ama de casa por ejemplo, queda neutralizada por la persistencia de una problemàtica existencial que proviene de sus anteriores films, y que produce finalmente ese ligero malestar en una obra importante pero con desajustes de estilo.


(*) Articulo de la revista Hablemos de Cine nº 63, Enero, febrero, marzo 1972.