“ Es importante
tener memoria , para no repetir los errores del pasado” dice el famoso refrán,
por eso es bueno recordar que hizo o no hizo el expresidente Alejandro Toledo
Manrique por el Cine Peruano. A continuación una transcripción de extractos de artículos
del critico de cine Federico De Cárdenas, donde revisa y resume lo concerniente
al cine de nuestro país y que provienen de sus balances cinematográficos del 2001 al 2006 , tiempo en el cual, el hoy
prófugo y acusado de corrupción gobernó el país.
“ 2001, Vuelta
al Año “. Diario La República , Suplemento Domingo – Página 30 - 30-Diciembre-2001.
“En el año que
termina debieron haberse realizado el 6° Concurso Nacional de Guiones de
Largometraje y el 7° Concurso de Cortometrajes, tal como lo ordena la Ley
26370, norma promulgada durante la dictadura
para reemplazar a la derogada Ley 19327, que rigió el cine peruano por
20 años , hasta 1992. Tal como ocurrió en el 2000, ni uno ni otro concursos
pudieron realizarse . En su lugar el Conacine convocó a un Concurso
Extraordinario de Cortos que pasó lamentablemente inadvertido y ocasionó una
polémica por sus inexplicables criterios de selección.
Desde su
instalación en 1995, el Conacine ha dado batallas cada más desesperadas para
cumplir con sus funciones, que lo obligan a convocar a dos concursos de
cortometrajes y uno de largometrajes cada año. Las batallas han sido contra la
incuria burocrática y la incomprensión de oscuros tecnocrátas del MEF
(Ministerio de Economia y Finanzas), incapaces de entender los incentivos de la
Ley. Es lo que hace que en 6 años de vigencia apenas si se ha podido cumplir
con la mitad de los concursos programados, el 2000 con ninguno y este año con
uno. Semejante déficit deriva de un problema de la Ley de Cine que señalamos
desde el inició: Depende de la buena voluntad del poder de turno.
Nuestra
impresión , compartida, con gran parte de los cineastas peruanos, es que la Ley
26370 no funciona,y que debe ser reemplazada por una norma más amplia y moderna
de medios audiovisuales, de otro modo nuestro cine seguirá limitado a los 2 ó 3
anuales que es su promedio desde hace 25 años,y el corto seguirá en abandonó,
sin salas donde proyectarse.
Menos mal, el
nuevo ministro de Educación Nicolás Lynch ha dado muestras de ser sensible al
problema y ya se ha instalado una comisión que prepara un anteproyecto de nueva
Ley del Audiovisual.
Si este año,
finalmente, no resulta tan deprimente como los anteriores con relación, al
desarrolló de nuestro cine se debe también a que comenzaron a funcionar las
ayudas del programa Ibermedia, organización por España en el marco de las
Cumbres Iberoamericanas. Es así que Alberto Durant (Mercurio no es un planeta)
, Augusto Tamayo (Una sombra al frente) y los debutantes Judith Vélez (Miranda)
, y Fabrizio Aguilar lograron apoyo económico inicial para montar
coproducciones para futuros largos. Costó una larga campaña lograr que el
gobierno peruano pagará los $ 100,000 que debía a Ibermedia, pero valió la
pena: los adelantos obtenidos totalizan un cuarto de millón de dólares. “.
“2002, vuelta al
año” Diario La República , Suplemento Domingo – Página 30 - 29-Diciembre-2002.
“ Desde su
instalación en 1995, el Conacine ha dado batallas cada más desesperadas para
cumplir con sus funciones. Entidad rectora del cine peruano de acuerdo con la
Ley 26370- norma promulgada durante la dictadura para reemplazar a la derogada
Ley 19327, que rigió nuestro por 20 años, hasta 1992 - sus batallas han sido
contra la incuria burocrática y la incomprensión de oscuros tecnocrátas del MEF
(Ministerio de Economia y Finanzas), incapaces de entender la necesidad de una
Ley de Cine, asi como tampoco entienden que debe existir una Ley del Libro.
Nuestra
impresión , compartida, con gran parte de los cineastas peruanos, es que la Ley
26370 no funciona. Tiene el defecto de depender
de la buena o mala voluntad del poder de turno y debiera ser reemplazada
por una norma más amplia y moderna de medios audiovisuales. De otro modo
nuestro cine seguirá limitado a los 2 ó 3 anuales que es su promedio desde hace
25 años,y el corto seguirá en abandonó, sin salas donde proyectarse . Menos
mal, la activa Comisión de Cultura del Congreso tiene ya entre manos un
Proyecto de Ley del Audiovisual , pero nadie puede asegurar que no ocurra con ella lo que pasó con la Ley
del Libro y sea encarpetada.
Un problema
coyuntural que se suma a los ya citados es que no ha sido este un buen año para
nuestro cine , tal como lo descubre el fracaso de los 3 largos estrenados, dos
de ellos premiados por el Concurso Nacional de Conacine . Se dirá - y con razón – que un guión no es la
película y que es posible que tanto
Django, de Ricardo Velásquez, como Muerto de Amor, de Edgardo Guerra lucieran
en el papel mucho más atractivas que lo que finalmente fueron – pues se trata
de obras fallidas , pero sus malos resultados pueden ser utilizados para
cuestionar la existencia de un cine peruano , lo que seria un error, ya que una
cinematografía requiere de un mínimo de continuidad , sin la cual nunca podrá
desarrollarse.
El 3° estreno
del año : El Forastero, de Federico García, es un bodrio tanto más imperdonable
por cuanto se trata de un cineasta de larga trayectoria y que demuestra pasar
por un proceso inexorable de involución. Atrás quedaron Kuntur Wachana o Túpac
Amaru, cintas discutibles pero que se encuentran a años luz de lo que hace hoy
día el realizador cuzqueño, que ya había demostrado carecer por completo de
sentido de la comedia en La Manzanita del Diablo, impresión que se ratifica con
este desastroso filme. “
“ 2003, vuelta
al año”. Diario La República, suplemento Domingo, Páginas 30,31- 04-Enero-2004.
“Recapitulemos: Desde
su instalación en 1995, el Conacine ha dado batallas cada más desesperadas para
cumplir con sus funciones. Entidad rectora del cine peruano de acuerdo con la
Ley 26370- norma promulgada durante la dictadura para reemplazar a la derogada
Ley 19327, que rigió nuestro por 20 años, hasta 1992 - sus batallas han sido
contra la incuria burocrática y la incomprensión de oscuros tecnocrátas del MEF
(Ministerio de Economia y Finanzas), incapaces de entender la necesidad de una
Ley de Cine.
Nuestra
impresión , compartida, con gran parte de los cineastas peruanos, es que la Ley
26370 no funciona. Tiene el defecto de depender
de la buena o mala voluntad del poder de turno y debiera ser reemplazada
por una norma más amplia y moderna de medios audiovisuales. De otro modo el
largometraje seguirá limitado a los 2 ó 3 anuales que son promedio desde hace
25 años,y el corto seguirá en abandonó, sin salas donde proyectarse. Ahora que
la Comisión de Educación y Cultura cumplió con
la Ley del Libro y la Ley del Artista, es el turno a la Ley del
Audiovisual, pero ojo si esta norma no resuelve el tema del financiamiento
seguiremos en las mismas.
De todos modos ,
este fue un año atípico
para el cine peruano, pues hubo 6 estrenos en la
cartelera comercial, algo que no ocurria desde 1983 y que se ha dado por
acumulación de proyectos de diversa antigüedad. De modo que no hay tal Boom –
grande o pequeño – con relación al largo, mucho menos si juzgamos la nula
calidad de dos de estos estrenos (Baño de Damas y Un Marciano llamado Deseo)
que revelaron total indigencia.
En otro nivel ,
es cierto, se encuentran los restantes debuts que registró el año. “Polvo
Enamorado “ de Luis Barrios, equivoca el tratamiento que debió dar a su
historia pero demuestra cualidades atendibles, por encima de las limitaciones
de su carácter de obra de encargo. “Paloma de Papel” de Fabrizio Aguilar,
aparte de algunas ingenuidades y defectos de toda ópera prima , logró
materializar un acercamiento no intelectualizado al difícil tema de la infancia y el terrorismo. Para
sorpresa de muchos , sintonizó con el gran público , que con casi 300 mil
espectadores la pusó entre las 15 cintas más vistas del año. “El Destino no
tiene Favoritos” de Álvaro Velarde, para nosotros el debut más promisorio ,
descubrió a un cineasta meticuloso y dotado para el difícil género de la
comedia, de quién se puede esperar en el futuro obras de gran interés.
La mejor cinta
peruana del año fue “Ojos que no Ven” de Francisco Lombardi, un proyecto
ambicioso y personal que quedará, sin la menor duda, como el gran testimonio (
concreto y metafórico a la vez) de
nuestro cine sobre la corrupción y la decadencia moral de los años siniestros
del fujimontesinismo. “Ojos que no ven” , por otra parte, logró el galardón más
importante otorgado a un largo nacional este año, el primer premio “Sol de Oro”
del Festival de Biarritz, que es – con Huelva – el más exigente de los certámenes
europeos dedicados a cine hispanoamericano.
En el terreno
del documental seria injusto olvidar a “Choropampa,el precio del oro” de
Ernesto Cabellos y Stephanie Boyd, que aborda con seriedad la terrible tragedia
provocada por el derrame de Mercurio de Yanacocha y ha ganado media docena de
premios internacionales. En cuanto al desprotegido cortometraje, condenado a la
invisibilidad por falta de pantallas donde mostrarse , sigue dando que hablar,
pese a todos los obstáculos. Existe una nutrida producción en video ( y muy
escasa en celuloide) que funciona como semillero formativo de nuevos cineastas
y en unos cuantos casos logra significado autonómo de gran creatividad. Parte
de esta producción esta siendo mostrada por Tv, pero requeriría ser confrontada
en un concurso nacional.
¿Qué nos aguarda
para el 2004?, en lo que se refiere a largos ya listos, el que ofrece potencial
interés es “Doble Juego” ( ex Mercurio no es un planeta) de Alberto Durant, que
podría ser el primer estreno peruano , en un año en el que Augusto Tamayo
rodaría “Una sombra al frente”, Judith Vélez su proyectada “Miranda” y Luis
Barrios su 2° largo “Muero por Muriel” . También Francisco Lombardi está sobre
un proyecto , cuyo titulo provisional es “ Locos” .
Al terminar el
año , se registró el tira y afloja habitual entre Conacine y el MEF, para que este último pague los $ 100,000 que
corresponde a la cuota peruana para el Fondo Ibermedia ( que ha hecho adelantes
por $300,000 a cineastas peruanos) Gracias a una gestión de la Cancilleria se
logró pagar $50,000 , la mitad de la cuota. Es de esperar , que se pague lo
restante, o se perderá la más concreta fuente de ayuda a nuestro cine. También
Conacine ha anunciado la realización de dos de los concursos que ordena la Ley.
Habrá que esperar para ver si recibe los fondos necesarios. “
2004, Brevisimo recuento de lo visto en la pantalla grande – Diario La República, Suplemento Domingo, página 26 , 02-Enero-2005.
“ En cuanto al cine peruano siguió sumido en la crisis, motivada en gran parte por la indiferencia del Estado, que incumple la Ley de Cine, pese a los esfuerzos del Conacine por invertir la tendencia, tal como lo demuestran los concursos de cortometraje y documental realizados. El 2004 será recordado por “Días de Santiago” ópera prima de Josué Méndez con premios en una decena de festivales y el mejor debut de un cineasta peruano desde “Muerte al amanecer” (1976) de Francisco Lombardi. Hay otras 10 peliculas anunciadas, pero se tuvo que hacer campaña para que el Perú no fuera expulsado de Ibermedia por incumplir sus cuotas. Asi estamos “.
El cine Peruano siguió sumido en la crisis , motivada en gran parte por la indiferencia del estado, que incumple la Ley de Cine pese a los esfuerzos del Conacine por revertir la tendencia , que este se materializaron especialmente en una inédita muestra de nuestro cine en el Festival de Cannes. Pero los cineastas tuvieron que hacer los mismos esfuerzos desesperados - y tenemos entendido que inútiles – para que Torre Tagle pague la deuda que se tiene con el fondo de financiamiento Ibermedia ( lo que significa la pérdida del único apoyo económico regular con que contaban ) y terminan el 2005 con la incógnita de ignorar cómo se negoció el tema clave de la diversidad cultural en el TLC (Tratado de Libre Comercio).
Pese a lo anterior se estrenaron 5 películas ( no todas rodadas este año) entre las cuales la más exitosa de cara al público fue el largo de animación “Piratas enel Callao” , propuesta bastante limitada . Luego ingresaron 3 largos de ficción, uno muy fallido que fue “Cuando el cielo es azul” de Sandra Wiese, y 2 de cineastas debutantes de la promoción más reciente : Mañana te cuento, de Eduardo Mendoza , y Un día sin Sexo, de Frank Pérez Garland. Ambas tienen en común el inmediatismo de sus propuestas y su mirar atento a la taquilla, lo que desde luego no es un crimen, pero sí un condicionamiento . Pérez Garland salió mejor librado que Mendoza, pero se trata de realizadores que pueden dar mucho más.
Cerró 2005 el mejor estreno nacional del año , el documental El Caudillo Pardo, de Aldo Salvini, cineasta de la generación intermedia que ya cuenta con un largo de ficción en su haber y que nos entrega un día en la vida de un nazi criollo a lo largo de un cuidadoso recorrido que tiene sus bajas de tensión, pero que en conjunto resulta apasionante. Carecemos de espacio para hablar de la producción de cortometrajes que , pese a tener todo en contra, prosigue. Un hecho que debe ser destacado. “
2006, vuelta al año. Diario La República, Suplemento Domingo, Página 23, 31-Diciembre-2006.
“ El cine Peruano siguió sumido en la crisis , motivada en gran parte por la indiferencia del estado, que incumple la Ley de Cine pese a los esfuerzos del Conacine por revertir la tendencia. Una campaña “Cineastas en Pantalla” ,llevada a cabo por realizadores , actores y técnicos de nuestro cine en noviembre, hizo público que el Estado apenas si ha entregado en 10 años el 15% de los aportes a los que está obligado por la Ley. Hubo ofrecimientos del nuevo gobierno para colmar la deuda, pero al final culminarion en una gran decepción ,pues los recursos consignados a Conacine son aun menores que con el Toledismo. Como ya es tradición, los cineastas tuvieron que hacer las mismas desesperadas gestiones para que Torre Tagle pague la cuota peruana a Ibermedia, un fondo de financiamiento al que se paga como uno y presta el triple de lo entregado, y que es en los hechos el apoyo económico más constante con que cuenta nuestro cine.
Pese a lo anterior, se estrenaron cinco largometrajes, de los cuales cuatro fueron óperas primas. Dos muy fallidas : Peloteros (Coco Castillo), y Talkshow (Sandro Ventura) ,y otra correcta que fue La Prueba (Judith Vélez) . La cuarta , que también fue la cinta polémica del año , descubre a una cineasta talentosa y de la que se puede esperar mucho: Nos referimos a Claudia Llosa y “Madeinusa” , laureada con una docena de premios internacionales. El último estreno fue “Mariposa Negra” largo 13° de Francisco Lombardi y 2° capitulo de una ambiciosa trilogía sobre el período fujimontesinista . Obtuvo el Premio Glauber Rocha del Festival de Montreal.
Carecemos de espacio para hablar de la producción de cortometrajes que , pese a tener todo en contra y ni siquiera pantallas regulares donde exhibirse , prosigue. Lo mismo podemos decir del interesante movimiento de largometrajes que se desarrolla en el interior del país y que, dentro de las limitaciones de todo cine paupérrimo, logra generar su propio circuito de espectadores. “.
No hay comentarios:
Publicar un comentario