Por : Victor Loli Schrader.Adam, un joven que a su corta edad recibe una mala noticia, que tiene un tumor espinal y la posibilidad de sobrevivencia de un 50/50, lo cual hace que su vida se vuelva un caos pero gracias a sus amigos y parientes él sale adelante. Con un argumento así creeríamos que estaríamos viendo una trillada película melodramática sobre el cáncer pero no es el caso, pues estamos ante un honesto drama, con toques de comedia, realizado con mucho ingenio y vitalidad.
El guión hecho por Will Reiser es lo mejor del filme con diálogos precisos y una historia llevada al límite sin caer en el melodrama, convirtiéndolo en un canto a la vida. El realizador Jonathan Levine (Foto izq.), toma con mucho tino el guión y sin mucho aspaviento le da a la película un buen ritmo y encuadres adecuados para el lucimiento de los actores. Joseph Gordon-Levitt y Seth Rogen están geniales en sus papeles de Adam y Kyle respectivamente, esta dupla nos recuerda por momentos a otra como la de Vittorio Gassman – Jean-Louis Trintignant del filme Il Sorpasso (1962) de Dino Risi. Otros que sobresalen son los padres de Adam interpretados por Angelica Huston y Serge Houde que hacen sentir su presencia en casi todo el filme, mientras que las actuaciones de Anna Kendrick y Bryce Dallas Howard están algo estilizadas pero son muy correctas.
En cuando a la cuestión técnica, la fotografía es correcta aunque nos evoca por momentos a un telefilme. El sonido y la puesta en escena son adecuadas y no sobresalen mucho. Lo más resaltante es la partitura musical y el soundtrack de la pelicula, que son muy buenas y que dan el tono emotivo que lleva el filme.
Una cinta independiente con un gran guión, buenas actuaciones y muy agradable de ver, en definitiva es altamente recomendable.
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